Por fin, después de mucho tiempo leyendo cuanta «Guía Mágica» llegaba a mis manos, sin ningún resultado concreto, decidí hacer lo que debería de haber hecho mucho tiempo atrás y fue, ponerme en manos de un especialista.

Mi sorpresa iba en aumento cuando veía que me pasaba algo así como con las Guías Mágicas. No veía resultados a corto plazo y mi esperanza se iba apagando porque no encontraba la salida.

Así que seguí consultando distintos y grandes especialistas  en el tema. Fueron pasando los meses, pasé bastante tiempo. Visité bastantes consultorios de expertos, buscaba a lo mejores, me volví un poco, no, bastante fans del tema en cuestión y quise averiguarlo todo hasta llegar al fondo y la raíz del problema.

 Por fin, un buen día, comencé a comprender que para solucionar mi problema de eyaculación precoz, debía quitarme muchas mochilas que llevaba en mi espalda. Quizás, mi error había sido buscar la solución en lugares equivocados. No habían fórmulas mágicas, todas aquellas notas que había apuntado al final no me habían servido para nada, eran pura basura…y todo lo que había metido en mi cabeza ..Dios mío…cuánta pérdida de tiempo…cuánta mala, errónea y falsa información había consumido…y a día de hoy sé que sigue circulando por internet….Cuántas mentiras habían conseguido que me hubiese tragado…Y yo como un tonto les creí…

Había estado profundamente equivocado y sentí un más profundo dolor aún en mi interior. Había vivido en un mundo de mentira en el que comencé a sentirme incómodo y para nada reflejado y perdí mucho tiempo hasta que me di cuenta. Me sentí triste y bastante engañado porque comprendí que a nadie le había importado mi problema de verdad. Pero no me di por vencido, eso me dio más fuerzas para seguir hasta el final. 

Sabía que, habiendo llegado a ese punto, iba a ser capaz de poner fin a mi tortura, fin, a mi problema de Eyaculación Precoz porque había dado con la raíz más profunda del problema y a partir de ahí estaba decidido a derribar todas las razones por las cuáles me encontraba en ese lugar y con esa pesada mochila a mis espaldas. Fue así como comenzó otra etapa de mi vida totalmente distinta cuando por fin, cada cosa se iba poniendo en su lugar.